140.- Sobre Poética...
141.- Jamás el escritor escribe él. Esa característica diferencia a un escritor, a un oficiador del arte de la escritura, de un escribidor. El escribidor es él escribiendo; el escritor es demiurgo de alguien -el narrador- que quiere expresar con sintaxis algo.
142- Un escritor debe ser -para poder ser llamado escritor- demiurgo de infinitos narradores.
143.- Cervantes, por ejemplo, es demiurgo del narrador del Quijote, un tal Cide Hamete Benengeli.
144.- Al igual que el escritor es intermediario entre el narrador y la historia que escribe también lo es entre el que la lee -el lector- y a quien está realmente dirigida esa historia, al cual -en teoría literaria- se le denomina el narratario.
145.- El narrador se dirige específicamente a alguien (el narratario). El escritor no tiene destinatario. Lo escribe (lo que narra el narrador) para cualquier lector.
146.- También es estos aforismos hay un narrador. No es Fernando Loygorri quien los escribe porque ese tal Fernando Loygorri no existe. Nadie existe. Fernando Loygorri es los dedos y el cerebro que ha ocupado un narrador para poder expresar estos pensamientos cortos, a modo de enseñanzas (enseñanza en el sentido de muestrario) por si dan con el narratario que él -el narrador- anda buscando.
147.- No son juegos de la imaginación es negación del Yo.
148.- El oficio de escritor -como todo oficio en el que la sensibilidad juega un papel predominante- es descarnado y genera una esclavitud hacia un poder invisible que puede llevar incluso a la inanición o a un dolor inimaginable para cualquier persona que no tenga la sensibilidad y el sentido como principios rectores.
149.- Nunca creáis al que afirma que la creación es placer puro, encuentro con lo divino porque a lo divino se suele llegar por el infierno... si se llega.
150.- Lo que suele acontecer es que el artista queda condenado hasta la eternidad -es decir, el no-tiempo- en alguno de los nueve círculos infernales de su propia comedia.
151.- Es falso que haya un narrador omnisciente absoluto porque el narrador también tiene Sombra.
Los aforismos que van desde el nº 140 al número 151
-y que se compendian bajo el título de Aforismos (14)-,
son todos responsabilidad del director y autor de esta revista
141.- Jamás el escritor escribe él. Esa característica diferencia a un escritor, a un oficiador del arte de la escritura, de un escribidor. El escribidor es él escribiendo; el escritor es demiurgo de alguien -el narrador- que quiere expresar con sintaxis algo.
142- Un escritor debe ser -para poder ser llamado escritor- demiurgo de infinitos narradores.
143.- Cervantes, por ejemplo, es demiurgo del narrador del Quijote, un tal Cide Hamete Benengeli.
144.- Al igual que el escritor es intermediario entre el narrador y la historia que escribe también lo es entre el que la lee -el lector- y a quien está realmente dirigida esa historia, al cual -en teoría literaria- se le denomina el narratario.
145.- El narrador se dirige específicamente a alguien (el narratario). El escritor no tiene destinatario. Lo escribe (lo que narra el narrador) para cualquier lector.
146.- También es estos aforismos hay un narrador. No es Fernando Loygorri quien los escribe porque ese tal Fernando Loygorri no existe. Nadie existe. Fernando Loygorri es los dedos y el cerebro que ha ocupado un narrador para poder expresar estos pensamientos cortos, a modo de enseñanzas (enseñanza en el sentido de muestrario) por si dan con el narratario que él -el narrador- anda buscando.
147.- No son juegos de la imaginación es negación del Yo.
148.- El oficio de escritor -como todo oficio en el que la sensibilidad juega un papel predominante- es descarnado y genera una esclavitud hacia un poder invisible que puede llevar incluso a la inanición o a un dolor inimaginable para cualquier persona que no tenga la sensibilidad y el sentido como principios rectores.
149.- Nunca creáis al que afirma que la creación es placer puro, encuentro con lo divino porque a lo divino se suele llegar por el infierno... si se llega.
150.- Lo que suele acontecer es que el artista queda condenado hasta la eternidad -es decir, el no-tiempo- en alguno de los nueve círculos infernales de su propia comedia.
151.- Es falso que haya un narrador omnisciente absoluto porque el narrador también tiene Sombra.
Los aforismos que van desde el nº 140 al número 151
-y que se compendian bajo el título de Aforismos (14)-,
son todos responsabilidad del director y autor de esta revista
Ventanas
Seriales
Archivo 2009
Escritos de Isaac Alexander
Fantasmagorías
¿De Isaac Alexander?
Meditación sobre las formas de interpretar
Libro de las soledades
Cuentecillos
Colección
Apuntes
Archivo 2008
La Solución
Aforismos
Haiku
Recuerdos
Reflexiones para antes de morir
Reflexiones que Olmo Z. le escribe a su mujer en plena crisis
Sobre las creencias
Olmo Dos Mil Veintidós
El mes de noviembre
Listas
Jardines en el bolsillo
Olmo Z. ¿2024?
Agosto 2013
Saturnales
Citas del mes de mayo
Reflexiones
Marea
Mosquita muerta
Sincerada
Sinonimias
Sobre la verdad
El Brillante
El viaje
No fabularé
El espejo
Desenlace
Perdido en la mudanza (lost in translation?)
La mujer de las areolas doradas
La Clerc
Velocidad de escape
Derivas
Carta a una desconocida
Asturias
Sobre la música
Biopolítica
Las manos
Tasador de bibliotecas
Ensayo sobre La Conspiración
Ciclos
Tríptico de los fantasmas
Archives
Últimas Entradas
Enlaces
© 2008, 2009, 2010, 2011, 2012, 2013, 2014, 2015, 2016, 2017, 2018, 2019, 2020, 2021, 2022, 2023 y 2024 de Fernando García-Loygorri, salvo las citas, que son propiedad de sus autores
Ensayo
Tags : Aforismos Redactado por Fernando García-Loygorri Gazapo el 06/10/2019 a las 13:30 | {0}