El tipo estaba hablando con una amiga suya. Se dolía de que su ex mujer tuviera una actitud tan desdeñosa para con él desde que se habían separado. La amiga comprendía que la ex mujer del tipo no quisiera saber nada de él. Que hubiera roto absolutamente su relación después de tantos años. El tipo se defendía aduciendo que cómo era posible que tras dormir juntos una noche y otra y otra sin que hubiera pasado nada definitivo para su ruptura, es decir, una paliza, un asesinato, una violencia bestial, no sé, cosas así decía, sino que más bien la separación se había producido por una distinta visión del mundo y las acciones, no pudieran seguir interesándose el uno por el otro. No pudiera ella... y terminaba diciendo el tipo, Porque el desdén es violento, el desdén es agresivo. Es un tratamiento contra las drogas le respondió la amiga. Eres un bar para una alcohólica. Eres el único sitio al que ella no puede ni asomar la nariz. Eres un servicio con rayas de coca encima de la cisterna del retrete en un garito de mala muerte a las cinco de la mañana para una ex-cocainómana. Eso eres para ella.
El tipo calló y agradeció la explicación.
El tipo calló y agradeció la explicación.